En mi intento de encontrar las convergencias de cine y fotografía, hoy traigo una película de John Huston que tiene interés desde el punto de vista cinematográfico y también desde el punto de vista fotográfico. Se trata de la película “Vidas rebeldes” filmada por John Huston en el desierto de Nevada entre el 8 de julio y el 2 de noviembre de 1960. Se estrenó el 1 de febrero de 1961.
PUNTO DE VISTA CINEMATOGRAFICO
El título original era “The missfit” es decir los inadaptados. Y es realmente lo que se narra en la película no solo a nivel actoral, sino de las propias vidas de los protagonistas.
La localización del rodaje en el desierto de Nevada, con temperaturas extremas, y el comportamiento de su director, John Huston contribuyeron más al caos ya imperante: Huston bebía en exceso y pasaba largas horas jugando en los casinos de Reno. Cuentan que más de una vez se quedó dormido mientras se rodaba una escena y que la productora de la película tuvo que hacerse cargo de sus deudas de juego.
El film suma drama, romance y western. Desarrolla un relato de personajes inadaptados, solitarios, desorientados y perdidos, que arrastran fracasos, desilusiones y frustraciones.
Esta es la despedida de tres actores de muy diferente estilo que tras el drama de solitarios del argumento padecían dramas personales muy profundos y tortuoso que acabaron a temprana edad con su vida. Fue la ultima película para dos de los protagonistas Marilyn Monroe y Clark Gable.
Es una película descorazonadora y triste, y aún lo habría sido mas si Houston se hubiera salido con la suya y hubiera filmado el final que quería, pero el guionista Arthur Miller impuso su idea de hacer otro final mas esperanzador, que es el que ha quedado para la historia.
Marilyn Monroe vivía una de sus peores crisis. Estaba casada con el dramaturgo de fama internacional Arthur Miller (1915-2005), bastantes años mayor que ella. Era el guionista de esta película. Había problemas con el guión y, sobre todo, con Marilyn, de manera que John Huston le pidió que asistiera al rodaje y supervisara y corrigiera.
Se cuenta que Marilyn siempre llegaba tarde, y Gable esperaba a realizar su papel en medio del desierto fumando un cigarrillo tras otro (fumaba cuatro cajetillas diarias)
Pasaban noches muy duras de reescritura y atención psicológica de Marilyn, quien moriría un año después por exceso de barbitúricos.
Esta fue su última película, su siguiente compromiso, Something’s Got to Give (George Cukor, 1962), fue despedida porque no era capaz de tenerse en pie e incumplía los horarios una y otra vez.
Clark Gable era el buen padrazo protector, pero a sus 59 estaba muy cascado. La muerte de su adorada primera esposa, Carole Lombard, le marcó los últimos veinte años de vida. Era una relación muy apasionada que sólo duró desde 1939 a 1942, año en que ella murió en un accidente de avión. Gable se casó dos o tres veces después y murió del corazón una semana después de acabar el rodaje antes de que esta película se estrenara.
Montgomery Clift sí haría tres películas más, y de las buenas, pero moriría en 1966 con 46 años, tras un complicado cocktail de alcohol y drogas. Siempre se dijo que era alguien de muy buen corazón, atormentado por su tendencia homosexual; fue un protegido de Elizabeth Taylor quien a menudo le sacó de apuros de todo tipo. En la película estaba bajo los efectos del alcohol y los barbitúricos, y estaba maquillado para disimular los efectos de un accidente que había tenido unos años antes, y que le había dejado la cara semiparalizada.
La intervención de Clift en la película fue por imperativo de Huston, porque había muchos problemas para su inclusión, entre ellos que el seguro no se hacia cargo del actor, por lo que actuó bajo su propio riesgo.
Cuentan que cuando estaba Clift horas antes de morir en su apartamento de Nueva York reponían Vidas Rebeldes por TV y su asistente le dijo si quería verlo :
¡En absoluto!, respondió el actor.
Como conclusión un poco morbosa, desde que se estrenó la película se sabia que se había rodado una escena de desnudo de Marilyn que al final Huston no incluyó en el montaje, porque decía que el ya sabia que las mujeres tienen pecho. Esta escena se conocía por una foto fija de Inge Morath durante el rodaje donde se ve a Marilyn medio desnuda tonteando con Gable, pero nunca se había encontrado y se pensaba que estaba destruida,
Esta escena estaba guardada en el despacho de Frank Taylor el productor de la película y en 1999 cuando falleció, su hijo permitió el acceso al despacho y se encontró la escena cortada.
PUNTO DE VISTA FOTOGRAFICO
La agencia Magnum tuvo acceso total a fotografiar la filmación de la película
Magnum seleccionó para la ocasión a nueve de sus mejores fotógrafos: Henri Cartier-Bresson, Eve Arnold, Inge Morath, Elliot Erwitt, Bruce Davidson, Ernst Haas, Cornell Capa. Dennis Stock y Erich Hartman fueron los encargados de documentar un rodaje que acabó pasando a la historia.
Según recordaba Eve Arnold después, “durante las sesiones de fotos, Marilyn tenía un control absoluto, lo manipulaba todo; a mí, a la cámara… Sabía muy bien lo que era una cámara y jamás he conocido a nadie que respondiera ante una como ella lo hacía. Así que conseguía lo que quería, y era así porque no sentía esa presión que la atenazaba cuando estaba en un rodaje: tener que recordar su texto, con horas y horas de trabajo…Conmigo era ella la que estaba al cargo de la situación”.
El libro ‘The Misfits: historia de un rodaje’ (Phaidon) recoge el trabajo de aquellos fotógrafos legendarios, con alrededor de 200 imágenes e incluye una larga entrevista con Arthur Miller.
Se reproducen a continuación algunas de las fotos de dicho rodaje, tomadas por estos grandes nombres de la fotografía.
HENRI CARTIER-BRESSON
EVE ARNOLD
INGE MORATH
ELLIOT ERWITT
BRUCE DAVIDSON
ERNST HAAS
CORNELL CAPA
DENNIS STOCK
ERICH HARTMANN
Aqui teneis un video con las fotos del rodaje.